El masaje interno es un procedimiento médico completamente inocuo. Así es como debe ser tratado.
Probablemente haya oído hablar del punto G, la parte escurridiza del cuerpo femenino, cuya estimulación proporciona a las mujeres un orgasmo fantástico. Ahora los sexólogos tienden a creer que realmente no existe el punto G, y la estimulación de diferentes partes del clítoris da el efecto. Pero seguro que existe algo más: el "punto G" masculino, que garantiza sensaciones simplemente fantásticas.
¿Qué es el punto G masculino?
El punto G masculino es lo que los sexólogos llaman próstata, un pequeño órgano del tamaño de una nuez en el recto que produce esperma y está rodeado por un gran haz de terminaciones nerviosas sensoriales. Esta es una zona erógena muy sensible, cuya estimulación realmente puede causar un orgasmo intenso y prolongado, "dando" a todo el cuerpo. Algunos expertos incluso creen que los orgasmos de estimulación de la próstata pueden ser más fuertes y más largos que los orgasmos de estimulación del pene normales.
Cómo encontrar el punto G masculino
Hay dos áreas clave para estimular para llegar a la próstata y encontrar su punto G.
Perineo entre los testículos y el ano
Un área pequeña entre la "raíz" de los testículos y el ano es un lugar muy sensible. Si estimula suavemente este lugar con el dedo, aumentando gradualmente la presión, puede lograr sensaciones fuertes y vívidas. También puede ser muy agradable estimular este punto con la lengua, si, por supuesto, tu pareja está de acuerdo.
La pared del recto
Dado que la próstata en sí está ubicada directamente en el recto, el efecto más poderoso puede provenir de su estimulación directa. He aquí cómo asegurarlo usted mismo:
- Toma una posición cómoda. Es posible que deba sentarse o acostarse.
- Asegúrese de que sus manos estén limpias y aplique lubricante en su dedo y ano.
- Inserte lentamente su dedo en el recto; es posible que deba moverse lentamente, generalmente el punto G se encuentra a una distancia de aproximadamente 4-5 centímetros.
- Presione sobre la pared del recto más cercana a la parte frontal del cuerpo.
- Siente cualquier signo de placer o aumento de la sensibilidad.
- Moviéndose lenta y cuidadosamente, retire el dedo del ano.
Tu pareja puede hacer lo mismo. Si simultáneamente estimulas la zona "exterior" de la próstata, en el espacio entre el ano y los testículos, con la otra mano o con la lengua, las sensaciones serán aún más agudas.